Los niños de un año lo han pasado en grande jugando con harina. El pasado martes disfrutaron experimentando con diferentes objetos que llenaban y vaciaban de harina: coladores, palitos, coches, vasos, etc. y por supuesto tocando la suave y blanca harina con las manos, incluso metiéndose de lleno dentro del montón de harina experimentando con el cuerpo.
Ha sido todo un descubrimiento con mil posibilidades de diversión.
